Prólogo.
Tenía previsto sacar este miércoles un artículo algo más complicado de esta serie sobre el tema de la reactiva eléctrica, ya que es un tema que tiene que ver precisamente con la “presunta causa” del apagón objeto de análisis en todo este culebrón.
Pero no, va a tener que esperar (tampoco es el que me resulte el más fácil), y no sólo porque la semana pasada aparecieron tres análisis importantes del tema.
El artículo de hoy es uno escrito a toda prisa por la precipitación de los acontecimientos.
Es, según el diccionario, una digresión.
Esto es, de facto, un espóiler, una información “insertada con calzador” en medio de toda una serie de artículos de análisis del problema grande que hay detrás del apagón del 28 de Abril de 2025.
Y lo saco este miércoles 25 de Junio, de forma urgente, precisamente por los sucesos de esta última semana, que culminan, justamente, hoy.
Cronología.
Corría el Año de Nuestro Señor de 2017, concretamente el 17 de mayo, que se hicieron una serie de subastas para instalar más energía renovable a integrar en nuestra red eléctrica.
Concretamente, 3909MW fotovoltaicos y 1128 MW eólicos, a partir de un mínimo de entrada de 3000, adjudicados definitivamente el 30 de Junio del mismo año por la Orden ETU/615/2017.
Llega 2020, y con él, el COVID, que todo lo paró. Así que se prorrogaron los plazos de entrega.
Y en 2021 y 2022, empezaron los problemas de falta de semiconductores, así que más problemas, más retrasos, y planificaciones que se van al traste.
17 de Abril de 2022, Domingo de Pascua, mínimo de demanda habitualmente, y primer día de curtailment en la fotovoltaica.
Desde entonces, aumento de plantas fotovoltaicas entrando, mientras el consumo sigue bajando, y, ante el exceso de oferta en solar, el precio del MWh durante las horas de insolación llega a 0.
Incluso a negativo.
¿Quién hace negocio regalando el producto que produce?
Evidentemente, la financiación y el interés económico en semejantes instalaciones cae igualmente, a cero.
Con lo que los retrasos ya habituales, junto con la nada ágil burocracia (y los informes de Impacto Ambiental), hace que muchos MW de potencia pendiente de instalar lleguen a su fecha límite de entrada de funcionamiento HOY 25 DE JUNIO DE 2025, sin que estén terminados ni en condiciones.
Pero, mientras, por el camino, apagón el 28 de Abril de 2025.
Y presentación de informes por parte del Estado y la REE el 17 de Junio de 2027.
Y, AYER, aprobación de un suReal MegaDecreto superurgente, que entra en vigor HOY, por la vía más rápida y exprés posible. Justo a tiempo.
Porque según el último aplazamiento, HOY debería haber una criba y echar el cierre a todas estas instalaciones.
Corre, corre, que me arruino.
Así que hay muchas empresas que están a un tris de entrar a regalar la potencia que produzcan. Todas del tipo REID. Y el Gobierno no quiere que esto estalle.
Pero ¿por qué estallar? Pues porque hay mucha más potencia REID pendiente de instalar, es decir, mucho negocio en montar parques, que es dónde viene el dinero de Europa (me pregunto si Koldo, o Ábalos, o Santos Cerdán sabrán algo al respecto).
Es en la instalación, constructoras y financieras mediante, que está el negocio, la burbuja, como ya dije.
Mismos protagonistas, hasta la Corredor de figura relevante.
El asunto es que había pendiente instalar 50 GW más de fotovoltaica, y parece que “se han caído”. Y, además, parece que algunas de esas instalaciones que tenían que estar en marcha para hoy desistieron y se retiraron.
De ahí que, en las prisas, en el suRreal MegaDecreto, se dediquen partidas de dinero a intentar paliar parte de la problemática, además de asegurar que aquellos que ya han hecho la inversión van a continuar con la obra.
No es momento de que todo esto se caiga.
Es más, como veremos en el segundo artículo de La Otra Reactiva (no sólo la electricidad tiene de eso), una parte de la historia tiene que ver con el almacenamiento y algunas obras que se iban a empezar este 2025, especialmente de bombeo, almacenamiento, etc.
Todo esto, salidas apuradas de última hora para intentar seguir manteniendo la burbuja, que al menos no estalle, aunque se vaya deshinchando lentamente, mantener la ilusión, mantener el relato, intentar evitar que un tipo de información que aquí vengo dando desde hace años (antes de montarme este Blog), llegue al público, porque el cambio en La Narrativa puede ser devastador.
Así que aquí entran otro tipo de medidas para salvaguardar la situación, y hacer caso a algunas de las reivindicaciones que hace años que también pululan por el sector. El asunto de la lentitud burocrática, que se merece su propio pack de entradas, entre las cuales podríamos incluir la trilogía de la Meritocracia (que sólo es el principio) es un viejo conocido.
Así que aprovechan la coyuntura para “reducir” el tiempo de espera a este tipo de documentación. De hecho, el “eliminar trabas burocráticas” pasa, por ejemplo, por eliminar la necesidad de declaraciones de Impacto Ambiental en unas instalaciones en las que dicho Impacto es impactantemente brutal y en contra del presunto “espíritu” de la ley, ese del SalvaPlanetas.
Curiosamente, los dos principales supuestos en que eliminan este tipo de “traba” es para instalar baterías (esas que arden), o para repotenciar parques (ampliar, pero, sobre todo, poner molinos más grandes, con capacidad para decapitar más pollos y aves desprotegidas).
Una curiosa manera de “salvar la Naturaleza”.
También van a imponer que “las renovables contribuyan a estabilizar la tensión”. Aja. Como iban a proporcionar inercia desde la ley de 2016. Esa que ha desaparecido totalmente del discurso.
En el fondo, todo esto es aceptar que se ha planificado fatal todo esto de la Intransición Misteriosa, y ahora tienen que tomar medidas más que previsibles, pero a toda prisa, por falta de previsión, que, de lo contrario, el estallido de todo este percal va a ser de órdago.
Y, como de costumbre, por alguna razón, este enorme fallo de planificación y de honestidad (especialmente por parte de los defensores de las REID), “es culpa de los negacionistas”, así que lo vamos a pagar entre todos.
Por supuesto, los beneficios (que en realidad nunca tendrían), irán a parar a unas pocas manos.
Pero, por si todo esto fuera poco encima aprovechan para lo de siempre: agarrar más poder para el Gobierno y los suyos, mientras hacen leyes para lanzar contra aquellos que no les gustan y miran hacia otro lado cuando los “amigos” las incumplen.
También (y de eso avisé ya en La Lavadora) van a aumentar los Pagos Por Capacidad a las centrales de Respaldo (eso subirá la factura de la luz), van a aumentar la cantidad de potencia interrumpible como se explicó en el Efecto Ribera, van a poner incentivos a poner cargadores de cochepilas (de los que veo un montón instalados pero sin servicio por el precio del contrato), van a pagar a todos aquellos que añadan control de tensión (es decir, los que hasta ahora causaban el problema, y que ahora cobraban a cero por su producción, ahora van a cobrar por seguir causando el problema pero menos, si instalan algo que encima se les financia, cuesta poco, y hace menos, como la “inercia sintética” que en teoría ya debían tener, puesto que eso mismo es un sistema de control de tensión).
Y, dados los problemas, van a poner un nuevo “ejército” (quizá lo acepte el zanahorio del Rutte para la OTAN, probablemente para electrificar los Panzers) que revise el estado del desastre, perdón, de la situación de la REE cada tres años, no sea cosa que vuelvan a pringar por falta de “herramientas”.
Ojo, que también van a aumentar la inversión en “herramientas”, más allá del tema control de la tensión. Hablan de añadir volantes de inercia (pero ¿acaso la inercia, según el informe, no es la causante del problema?), reactancias conmutables (sistemas de control que no son capaces de controlar las REID, pero que no hacen falta cuando la penetración de dichas energías es menor, dicho lo cual, esto significa que no creen que las REID puedan arreglar el problema, así que pagaremos nosotros las soluciones a los problemas que causan las REID).
Y respecto del almacenamiento… ya hablaremos otro día, pero como esto es un espóiler, tras el inicio del curtailment en 2022, se empezó ya a planificar mucho de esto, pero todo ello, bombeo reversible.
Conclusiones.
Todo el problema con las renovables es que en el fondo es una burbuja especulativa que no está funcionando (como era más que obvio de salida) pero que prometía muchos beneficios y muchas lealtades.
Como no nos electrificamos por las buenas, nos van a electrificar por las malas (¿para cuándo electrificamos las sillas del Congreso?). Así que vamos a instalar más GW de fotovoltaica, aunque no haya consumo. Igual que hicimos aeropuertos sin vuelos, palacios de congresos sin congresos, y demás.
Como todas las burbujas, tarde o temprano, revientan. Y se está acercando el momento del estallido.
Como la anterior, los presuntos implicados, son los mismos, y con la misma gente al mando.
Y, como en la anterior, se nos va a pasar la factura de los problemas (y beneficios) de unos a todos los demás, con la “novedad” que esta vez estamos peor y la cosa apunta maneras de Crisis de Deuda Soberana, a nivel europeo, y con peor pronóstico.
Encima le viene en mal momento al desgobierno, como creo que quién más quien menos puede entender.
El calibre de este problema puede llevarse por delante toda la UE, el sistema bancario, los Estados del Bienestar, y muchas más cosas.
Por sus frutos los conoceréis, y aquí tenemos uno de esos frutos, un Real Decreto, así como un par de informes que atestiguan por dónde van los tiros.
Hasta la próxima,
Beamspot.